"Con toda honestidad, en realidad es cada vez más útil no lavar los platos antes de colocarlos en el lavavajillas", reveló Morgan Brashear, un investigador de Cascade con Procter and Gamble, a Today Home.
Esto se debe a que la mayoría de los lavavajillas de última generación tienen sensores que ayudan a la máquina a decidir hasta qué punto de un ciclo se ejecutará, a la luz de qué tan sucios están los platos. Independientemente de si selecciona un ajuste particular antes del ciclo, por ejemplo, "típico" o "ollas y recipiente", la duración del ciclo de limpieza y la temperatura del agua se establecen según lo que distingue el sensor. En el caso de que no deseche sus platos antes de colocarlos en el lavaplatos, el lavavajillas distinguirá la proximidad de la acumulación de sustento que se cae durante el prelavado, y el lavavajillas tendrá cada vez más cuidado en la limpieza de sus platos.
En cualquier caso, si la acumulación principal de sustento que aún permanece en sus platos es un cheddar seco y duro que no se enjuaga eficazmente, el lavavajillas no reconocerá la nutrición y el ciclo será más corto y menos exitoso. De hecho, esto puede aclarar por qué ahora y nuevamente abres el lavavajillas para encontrar que aún queda acumulación en ese plato de comida.
Recuerde que si bien enjuagar demasiado los platos antes de colocarlos en el lavaplatos puede que no sea una propensión increíble, también es evidente que un exceso de fuerte acumulación de nutrientes puede ser difícil de manejar para el lavavajillas. Gunk se puede atascar en el marco, especialmente si su lavavajillas no tiene un canal o una transferencia de basura hacia adentro.
Su opción más lógica es raspar enormes bultos de alimento que aún permanecen en sus platos, sin embargo, no desea lavarlos completamente en el fregadero. Según Consumer Reports, en el caso de que comprara su lavavajillas por más de $ 500 durante los últimos cinco años, debería ser más que adecuado para darle a su vajilla una limpieza exhaustiva.
